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martes, 24 de abril de 2012

Homenaje a Veteranos y Caidos en Malvinas en la Escuela de Comercio Nº 12: palabras alusivas



En la mañana del 18 de abril se llevó a cabo el homenaje a veteranos y caídos en Malvinas en la Escuela de Comercio Nº 12 de la Ciudad de Buenos Aires, como cierre de un proyecto interdisciplinario que se desarrolló durante el ciclo lectivo 2011 entre cuyas actividades se destaca la construcción de un monolito en el patio de la escuela.

Comparto con los lectores las palabras alusivas que escribí para este acto.



Nos encontramos  reunidos para rendir  homenaje  a todos los argentinos que fueron protagonistas de un hecho histórico trascendente de nuestra vida nacional, en el que se recuperaron temporalmente  nuestras islas Malvinas, usurpadas por Gran Bretaña desde 1833.
Hoy, queremos expresarles  a todos los  veteranos y familiares presentes, que estamos muy felices de compartir esta conmemoración junto a ustedes y que nos honran con su presencia.
Somos conscientes de todo lo que lucharon  por recuperar nuestras islas frente a uno de los  ejércitos más poderosos del planeta, del sabor amargo que toda derrota militar conlleva, junto a la irreparable pérdida de vidas, como así también del doloroso desamparo  que vivieron los soldados ni bien llegaron al continente por parte del Estado Nacional, lo cual dificultó la reinserción social durante los años de posguerra.
Admiramos el obrar de sus familias y amigos que los acompañaron en el duro regreso a casa y en la perseverante lucha por el reconocimiento histórico durante estos 30 años.
Honramos la memoria de cada uno de los 649 caídos por la Patria: los héroes del Crucero Gral Belgrano, oficiales, suboficiales y soldados  del Ejército e Infantería de Marina,  personal y pilotos de la Fuerza Aérea, Aviación Naval,  y demás personal de la Armada, Gendarmería, Prefectura y  de la Marina Mercante que participaron de esta gesta.
También están presentes en nuestro recuerdo, aquellos hermanos que regresaron de las islas, pero carentes de la asistencia necesaria, no pudieron superar lo vivido y decidieron quitarse la vida por mano propia, lo cual nos invita a una crítica reflexión como sociedad.
Valoramos  profundamente la decisión de la Comisión de Familiares de caídos en Malvinas de construir  el  Cementerio Argentino en las mismas islas.
Esta decisión patriótica, ubica a las familias de nuestros héroes, a la altura del coraje y del amor a la patria, que ellos demostraron en el campo de batalla.

Actualmente en el sistema educativo el abordaje del estudio de la causa Malvinas está sujeto a diferentes enfoques y miradas.
En nuestra escuela, el colegio secundario más antiguo del barrio de Lugano, trabajamos para sembrar en nuestros jóvenes el amor a nuestro país, haciéndoles tomar conciencia de nuestras riquezas y potencialidades y valorando el esfuerzo de nuestros antepasados y contemporáneos en la lucha por la construcción y consolidación de la Patria Grande.
Desde esta perspectiva creemos que la causa Malvinas no sólo debe estudiarse con la profundidad debida por ser nuestra Patria usurpada y que debemos seguir luchando por recuperarla, sino que encontramos un espacio para  trabajar nuestra Argentinidad y pertenencia Latinoamericana
Malvinas, siempre fue una causa que unió en un solo corazón  a todo nuestro pueblo, incluso cuando  los gobiernos de turno no se identificaban con el sentir popular como ocurrió en aquel abril de 1982.
Malvinas dejo a la luz  a lo largo de la historia argentina, las mayores riquezas de nuestro pueblo, desde el coraje del gaucho Rivero que se alzó contra la usurpación británica en 1833 junto a ese puñado de gauchos y charrúas, hasta la magnanimidad de nuestros héroes.
El fervor patriótico popular con que se vivió la recuperación de las islas, los miles de voluntarios que se inscribieron para ir a la guerra y las interminables donaciones del pueblo, hablan del sentimiento patriótico de los argentinos hacia las islas.
Pero lamentablemente, Malvinas también nos enfrenta con nuestras propias miserias. Por un lado  la de  nuestra actual sociedad exitista y  banal, donde lo único que vale es triunfar, no importa de qué forma y donde el esfuerzo,  parece no valer la pena, lo cual se tradujo en situaciones de indiferencia hacia los veteranos durante muchos años.
Asimismo dejó en claro, la falta de patriotismo de ciertas personalidades  de nuestra dirigencia y del mundo intelectual, que fueron más funcionales a los intereses británicos que a los nacionales, siendo  grandes promotores de la desmalvinización, que impulsaron el olvido,  tapando  actos heroicos que hubo en la guerra, victimizando a veteranos y caídos, sumado a la firma de acuerdos humillantes con los británicos, cuyas consecuencias  vivimos hasta la fecha.
Es importante poder realizar un análisis crítico de  nuestro ser nacional y  revisar  nuestra historia, en pos de conocer la verdad histórica y  tomando conciencia de ella, poder proyectar un futuro mejor. 
Malvinas  tendió en aquel entonces, puentes de unidad con países hermanos como la República del Perú y otros de la región,  los cuales se han ido consolidado y ampliando con los años para acompañar actualmente a la Argentina  a través de diferentes acciones, en nuestro reclamo de soberanía, fortaleciéndose de este modo la unidad latinoamericana.
Mantenemos la esperanza  que finalmente las islas  volverán a casa y será de la mano de Latinoamérica, pero hay que tener claro que nadie hará ni por Malvinas, ni por nuestro país, aquello que los argentinos no seamos capaces de hacer por nuestra Patria.
Hoy Malvinas  es  una fuente de apropiación de recursos naturales  por parte del imperio británico en un punto geoestratégico del Atlántico Sur, con proyección antártica y una fortaleza del colonialismo en el continente americano, desde el momento en que se  encuentran asentadas  bases militares, que constituyen una verdadera amenaza para la paz.
Volverá a flamear la celeste y blanca en las islas, en tanto y en cuanto, se  trabaje comprometidamente para conseguirlo, muy especialmente en el plano político, diplomático, mediático, cultural y educativo y se utilice la inteligencia y creatividad en la lucha contra un imperio que todo lo pretende  someter a su voluntad utilizando su poderío militar o intimidando con el mismo.
Frente a esta circunstancia, transferir el conocimiento de nuestros derechos soberanos en Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, a los  jóvenes que no vivieron la guerra,  manteniendo viva la memoria de nuestros héroes y  sobre todo  lograr el interés y el compromiso de las nuevas generaciones que tendrán que defender en un futuro cercano esta causa, es una responsabilidad que los docentes en particular  los de ciencias sociales no podemos evadir, si realmente deseamos educar en pos de una  Patria Grande  y soberana.

Sabemos que se educa más con el ejemplo que con la palabra y que lo que verdaderamente moviliza a los jóvenes  son  testimonios de vida  donde exista una  coherencia entre el sentir, el decir y el hacer.
Los veteranos, protagonistas  de esta historia, son un claro ejemplo de los ideales en los que deseamos educar, de allí la importancia de su presencia en la escuela
El Gral Don José de San Martín dijo que los soldados de la Patria no  conocen de lujo, sino de gloria y que para defender la causa de la independencia no se necesita otra cosa que orgullo nacional. Estos dos pensamientos sanmartinianos que impulsaron el heroísmo de  nuestro ejército en tiempos de lucha por nuestra libertad política de España, están claramente reflejados en el obrar de  nuestros héroes de Malvinas. 
Ustedes, libraron una honorable lucha en el campo de batalla  y con espíritu de sacrificio y  valentía enfrentaron   a un ejército poderoso que contó con el apoyo de una de las grandes potencias mundiales.
El esfuerzo que realizaron por recuperar lo que es indudablemente  nuestro, son ejemplos de vida que consideramos que  nuestros jóvenes deben saber apreciar  en tiempos en donde prevalece en nuestra sociedad, el facilismo, el materialismo,  un  marcado individualismo, y en muchos casos  un déficit importante de patriotismo.
Nunca olvidaremos que cuando  la Patria más los necesitó, dieron el  presente, y así nos dejaron a todos  como legado que el bien común,  la defensa del país y la lucha contra los imperialismos que avasallan a los pueblos, está por encima de los intereses personales  y de cualquier gobierno de turno.

Ustedes y sus compañeros, nos marcaron con sus ideales un camino de grandeza.
Está en cada uno de nosotros vivir todos los días, los valores que estuvieron presentes en Malvinas,  para que la sangre derramada de nuestros héroes no haya sido en vano y poder consolidar la Patria Grande por la que ellos entregaron su vida.
Para finalizar  queremos decirles, que todo este homenaje realizado para conmemorar estos 30 años de Malvinas, es el fruto de una comunidad educativa, que   por sobre todas las cosas tiene el deseo de expresarles públicamente  el afecto, el orgullo y la gratitud que siente  por cada uno de ustedes, a la que adhieren autoridades políticas, ministeriales, instituciones educativas, y vecinos de nuestro barrio que se suman a esta celebración.
De ahora en más, ya no sólo estarán  presentes en nuestras clases de ciencias sociales, sino que nos acompañarán todos los días en este patio,  que es el corazón de nuestra escuela, junto a nuestra bandera, ocupando así  un  lugar privilegiado que sólo podía  ser asignado a grandes patriotas  de nuestra historia como lo son  los héroes de Malvinas.
En nombre de todos: muchas gracias.




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